El diagnóstico cambia tu vida… pero no cambia tu valor
🧍♀️ 1️⃣ No eres un diagnóstico
-
No eres “una metastásica”.
-
Eres una mujer que tiene un cáncer, pero también tiene una historia, una voz, una fuerza que no se ve en los análisis.
-
El cáncer no borra tu identidad, solo te hace recorrer un nuevo camino.
💡 Tú no eres lo que te pasa. Eres lo que haces con lo que te pasa.
💚 2️⃣ Sigues siendo valiosa, incluso cuando te sientes rota
-
Hay días buenos, y hay días de miedo, tristeza o cansancio extremo.
-
Pero incluso en esos días, sigues siendo tú:
-
La que ama fuerte
-
La que lucha en silencio
-
La que se levanta aunque duela
-
💡 Tu valor no depende de tu energía. Ni de tu productividad. Solo de ser tú.
🌈 3️⃣ Sigues siendo capaz de disfrutar, reír, amar
-
Puedes tener metástasis y seguir enamorándote de un atardecer, una canción o una caricia.
-
Puedes reírte hasta que te duela la barriga, llorar en brazos de alguien querido, emocionarte con un “te quiero”.
💡 La vida no se detiene en la enfermedad… se transforma.
🪞 4️⃣ Sigues mereciendo amor, deseo, belleza
-
Tu cuerpo ha cambiado, sí. Pero tu dignidad, tu belleza y tu derecho a sentir placer y ser amada siguen intactos.
-
No necesitas ser “como antes” para ser valiosa ahora.
💡 Eres completa, incluso si te sientes rota. Y mereces ternura, no lástima.
🤝 5️⃣ Sigues siendo tú… y eso es lo más valiente
-
Cada vez que hablas, compartes, decides seguir… estás dejando una huella.
-
Estás haciendo visible lo invisible.
-
Estás mostrando que la metástasis no apaga tu voz, tu esencia, tu luz.
💡 Eres tú. Con cicatrices. Con miedos. Con sueños. Con fuerza. Con metástasis. Y con vida.
🌷 Conclusión
Tú sigues siendo tú.
Aunque te hayan operado.
Aunque estés cansada.
Aunque haya días grises.
Aunque te pregunten si estás bien y no sepas qué responder.
🎗 Sigues siendo hija, madre, amiga, amante, jefa, artista, soñadora…
💛 Sigues siendo tú.
Y eso es lo más importante de todo.