El deseo también merece cuidados
🧍♀️ 1️⃣ Tu cuerpo ha cambiado… pero tú no has dejado de ser tú
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El tratamiento puede alterar tu imagen corporal (cicatrices, hinchazón, caída del cabello…).
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Puede afectar a tu zona íntima (sequedad, dolor, pérdida de sensibilidad…).
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Pero tu capacidad de sentir, amar y desear sigue estando en ti, aunque se exprese de otra forma.
💡 No eres menos mujer, ni menos atractiva. Solo estás en otro momento de tu cuerpo.
🗣️ 2️⃣ Hablar de sexualidad es parte de tu salud
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La sexualidad es mucho más que penetración: es placer, afecto, conexión, caricias, complicidad.
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Puedes hablar con tu oncólogo/a, tu ginecólogo/a o un/a psicooncólogo/a sobre los cambios que experimentas.
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Existen productos y estrategias para mejorar el confort sexual: hidratantes vaginales, lubricantes, fisioterapia del suelo pélvico…
💡 Tu deseo merece ser escuchado y cuidado. No te conformes con el silencio.
❤️ 3️⃣ Con pareja: la intimidad también se reconstruye
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Tu pareja puede sentir miedo de hacerte daño, no saber cómo acercarse o sentirse confundida.
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Hablar abiertamente de lo que sientes, necesitas y deseas puede acercaros en lugar de alejaros.
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No hace falta volver “a como era antes”, sino crear juntos un nuevo espacio de intimidad.
💬 Puedes decir:
👉 “Necesito sentirme abrazada, no solo cuidada.”
👉 “Quiero que hablemos de lo que ambos sentimos con esto.”
💡 La pareja también puede reaprender a desear, a tocar y a acompañar.
🤲 4️⃣ Si estás sola: sigue siendo válido desear, ilusionarte o buscar una relación
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Puedes vivir tu sexualidad contigo misma, con libertad, sin culpas.
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Si aparece alguien especial, tienes derecho a elegir cómo compartir tu historia, a tu ritmo.
💡 El deseo no desaparece con el cáncer: se transforma, madura, encuentra nuevas formas.
🌸 5️⃣ El placer no es un lujo: es parte de tu bienestar
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Masajes, baños relajantes, caricias, respirar profundamente, moverte con música…
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Todo lo que te conecta con tu cuerpo desde el disfrute también es sexualidad.
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Reconectar con tu placer puede ayudarte a sentirte viva y presente.
💡 Tu cuerpo merece gozo, no solo cuidados médicos.
✅ Conclusiones clave
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💞 La sexualidad es parte de tu salud, y merece ser vivida sin tabúes ni vergüenza.
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💬 Hablar con tu pareja (o contigo misma) puede abrir puertas a una intimidad más real y cuidada.
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🤲 Estés sola o acompañada, tu deseo sigue siendo tuyo y es válido.
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🌿 Hay recursos (médicos, físicos y emocionales) para ayudarte a recuperar la conexión con tu cuerpo.
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💛 No tienes que volver a “como eras antes”. Puedes crear una nueva forma de amar, sentir y disfrutar.