¿En qué casos está recomendada y por qué?

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Dra. Mª Jesús Rubio Pérez Jefa del Servicio de Oncología

La quimioterapia intraperitoneal (IP) para el cáncer de ovario se recomienda en casos específicos, generalmente en pacientes con cáncer de ovario avanzado (estadios III o IV), especialmente cuando la enfermedad se ha diseminado a la cavidad abdominal. A continuación te explicamos en detalle cuándo y por qué está recomendada esta modalidad de tratamiento:

1️⃣ Casos en los que está recomendada la Quimioterapia Intraperitoneal

1.1. Cáncer de ovario en estadios avanzados (III y IV)

  • Estadio III: El cáncer de ovario se ha diseminado a ganglios linfáticos o otras áreas de la cavidad abdominal como el peritoneo o el intestino. En este estadio, el cáncer se encuentra en una fase en la que la cirugía por sí sola puede no ser suficiente para eliminar todas las células tumorales.

  • Estadio IV: El cáncer ha diseminado a otras partes del cuerpo, como los pulmones o el hígado. En estos casos, la quimioterapia intraperitoneal puede ser útil para controlar la enfermedad en la cavidad abdominal, aunque no sea capaz de erradicar el cáncer en su totalidad.

1.2. Cáncer de ovario con diseminación peritoneal

  • El peritoneo, la membrana que recubre la cavidad abdominal, es uno de los lugares más comunes donde el cáncer de ovario se disemina. Cuando el cáncer se disemina de esta manera, puede ser más difícil de tratar con quimioterapia intravenosa convencional, que distribuye los fármacos por todo el cuerpo.

  • La quimioterapia intraperitoneal tiene la ventaja de administrar los fármacos directamente en el abdomen, donde se encuentran las áreas afectadas, permitiendo que el medicamento tenga una concentración mucho más alta en las zonas afectadas.

1.3. Después de cirugía de citorreducción

  • En los casos de cáncer de ovario avanzado que son operables, la cirugía de citorreducción (eliminación de la mayor parte del tumor) es una parte clave del tratamiento. Sin embargo, incluso después de una cirugía exitosa, es posible que queden células cancerosas residuales en la cavidad abdominal, lo que aumenta el riesgo de recurrencia.

  • La quimioterapia intraperitoneal se administra después de la cirugía para reducir el riesgo de recurrencia. La idea es eliminar las células cancerosas residuales que pueden estar en el peritoneo, lo que mejora las probabilidades de éxito y reduce la posibilidad de que el cáncer regrese.


2️⃣ ¿Por Qué Está Recomendada la Quimioterapia Intraperitoneal?

La quimioterapia intraperitoneal es una modalidad de tratamiento recomendada porque ofrece una serie de ventajas frente a la quimioterapia intravenosa convencional, especialmente cuando se trata de cáncer de ovario avanzado con diseminación peritoneal:

2.1. Mayor concentración de fármacos en el área afectada

  • Una de las principales razones por las que la quimioterapia intraperitoneal está recomendada es que permite una concentración mucho mayor de medicamentos en la cavidad abdominal. Dado que el cáncer de ovario se disemina frecuentemente al peritoneo, la quimioterapia administrada directamente en esta área tiene una mayor posibilidad de alcanzar y destruir las células cancerosas de manera más eficaz.

2.2. Mejor control local del cáncer

  • La quimioterapia intravenosa distribuye los fármacos por todo el cuerpo, lo que significa que las concentraciones en el peritoneo pueden no ser suficientes para combatir el cáncer localmente. La quimioterapia intraperitoneal se dirige específicamente a la cavidad abdominal, donde el cáncer de ovario suele diseminarse, lo que permite un tratamiento más efectivo en esta zona.

2.3. Mejores resultados a largo plazo

  • Estudios clínicos han demostrado que la quimioterapia intraperitoneal, cuando se combina con cirugía de citorreducción, puede mejorar las tasas de supervivencia y reducir la probabilidad de recidiva en pacientes con cáncer de ovario avanzado. Esto es especialmente cierto cuando la enfermedad se ha diseminado al peritoneo, lo que hace que el tratamiento intraperitoneal sea una opción valiosa para aumentar la eficacia del tratamiento.

2.4. Menos efectos secundarios sistémicos

  • Dado que la quimioterapia intraperitoneal administra los fármacos directamente en la cavidad abdominal, la cantidad de medicamento que se distribuye por todo el cuerpo es menor que con la quimioterapia intravenosa, lo que puede reducir los efectos secundarios sistémicos como la náusea, la caída del cabello o la fatiga.


3️⃣ ¿Quiénes Son Candidatas a Recibir Quimioterapia Intraperitoneal?

No todas las pacientes con cáncer de ovario son candidatas para la quimioterapia intraperitoneal. Este tratamiento es más adecuado para mujeres que cumplen con ciertos criterios, que incluyen:

3.1. Mujeres con cáncer de ovario en estadios avanzados (III o IV)

  • La quimioterapia intraperitoneal se utiliza principalmente en mujeres con cáncer de ovario que están en estadios III o IV, donde el cáncer se ha diseminado a la cavidad abdominal o a otros órganos cercanos.

3.2. Mujeres que han sido sometidas a cirugía de citorreducción

  • Es más común que se administre quimioterapia intraperitoneal después de una cirugía de citorreducción óptima, es decir, cuando se ha eliminado la mayor parte del tumor. La quimioterapia intraperitoneal tiene más probabilidades de ser eficaz cuando no queda mucho tumor visible.

3.3. Pacientes con buena salud general

  • Aunque la quimioterapia intraperitoneal es un tratamiento eficaz, también puede ser más agresiva que la intravenosa. Por lo tanto, las pacientes deben estar en buena condición física para tolerar los efectos secundarios y el procedimiento asociado con la administración de la quimioterapia.


4️⃣ Limitaciones y Riesgos de la Quimioterapia Intraperitoneal

Aunque la quimioterapia intraperitoneal tiene ventajas significativas, también presenta limitaciones y riesgos:

4.1. Procedimiento quirúrgico

  • Para administrar la quimioterapia intraperitoneal, es necesario colocar un catéter en la cavidad abdominal mediante un procedimiento quirúrgico, lo que implica ciertos riesgos asociados con la cirugía, como infección o sangrado.

4.2. Efectos secundarios locales

  • Los efectos secundarios pueden incluir dolor abdominal, hinchazón y náuseas. Algunos pacientes también pueden experimentar dificultades gastrointestinales o problemas digestivos debido a la quimioterapia administrada directamente en el abdomen.

4.3. No es adecuada para todas las pacientes

  • La quimioterapia intraperitoneal no es adecuada para todas las mujeres con cáncer de ovario. El tratamiento puede no ser viable en casos donde el cáncer se ha diseminado a otras partes del cuerpo fuera de la cavidad abdominal o si la paciente no puede tolerar el procedimiento.


✅ Conclusión

La quimioterapia intraperitoneal está recomendada principalmente en pacientes con cáncer de ovario avanzado (estadios III y IV), especialmente cuando la enfermedad se ha diseminado a la cavidad abdominal. Esta modalidad permite administrar los fármacos directamente en el área afectada, ofreciendo mayor concentración de medicación, mejor control local del cáncer, y mejores resultados a largo plazo.

No es adecuada para todas las pacientes, pero cuando se usa en combinación con cirugía de citorreducción, puede reducir el riesgo de recidiva y mejorar las tasas de supervivencia.